Carlos Paz es uno de los destinos turísticos cordobeses más elegido por los argentinos. Su popularidad se debe a que, entre otras cosas, la ciudad es dueña un paisaje excepcional que nunca decepciona: un inmenso lago rodeado de sierras parece ser la combinación perfecta.

En cualquiera de las cuatro estaciones, el clima transforma el escenario natural, ofreciendo diferentes actividades para realizar al aire libre. Además, la ciudad se completa con una completa oferta gastronómica y una variada cartelera teatral que atrae a todo tipo de espectadores.

¿Algo más? Sí, Carlos Paz se encuentra ubicado en un punto estratégico: a treinta de Cordoba Capital por autopista y a media distancia entre dos circuitos turísticos principales: el Valle de Punilla (donde se ubican localidades como Cosquín, La Falda y Capilla del Monte)  y Traslasierras (Parque Nacional Quebrada del Condorito, Mina Clavero, Nono, Villa Dolores).

6 lugares tradicionales de Villa Carlos Paz para visitar

La mejor manera de recorrer la ciudad es caminando. Todo se encuentra cerca para alcanzarlo a pie. Además, es un ambiente tan relajado que nos permite disfrutar el trayecto entre un atractivo y otro.

– El Reloj Cu-Cú: es un emblema de la ciudad. Instalado en 1958, es uno de los lugares claves en tu visita a Villa Carlos Paz. Fue construido por ingenieros alemanes, quienes destacaron algunas características propias de su país de origen, y en su momento fue considerado uno de los más grandes del mundo en su estilo. Para contemplar el pájaro de madera articulado tendremos que esperar media hora. Cada treinta minutos sale a dar su show como aviso del paso del tiempo.

-Parque Estancia La Quinta: a solo diez cuadras del centro se trata del patrimonio cultural y legado de los jesuitas en su paso por las sierras. Se pueden ver las construcciones de la época junto a un predio de cinco hectáreas que cuenta con una importante variedad de plantas autóctonas y exóticas plantadas por los jesuitas.

– El Embudo: forma parte del Dique San Roque, obra de ingeniería convertida en atractivo turístico,  construida en 1981 para proveer de agua a la ciudad de Cordoba. Por aquel entonces se consideró la más importante de toda América. Se puede llegar en auto paseando por el camino de las cien curvas, a unos 11 km desde Carlos Paz.

– Cerro de la Cruz: a unos 800 metros de la zona céntrica de la ciudad, al pie del cerro de la famosa Aerosilla, se encuentra el ingreso a un Vía Crucis que alcanza una altura de mil metros a través de un camino sinuoso apto para todo público. En la cima, espera una cruz de quince metros de altura y las mejores vistas panorámicas de Carlos Paz.

– Paseo de los Artesanos: como en toda ciudad concurrida, las artesanías locales son un excelente atractivo para el turista. De esta manera se puede visitar en las calles Alem y Las Heras, un paseo donde los artesanos exhiben los más variados tipos de creaciones. En las temporadas altas podemos encontrar más de 50 puestos con diferentes tipos de artesanías exhibiéndose hasta altas horas de la noche.

– Paseo por la Costanera: es ideal para despejar la mente. A orillas del río San Antonio y en conjunto con una variedad de puentes que lo cruzan, nos permite caminar bajo un entorno natural magnífico. Es simplemente un lugar para disfrutar del aire libre acompañado de un divertido picnic.

Si visitas Villa Carlos Paz, te sugerimos que te alojes en Amérian Carlos Paz Apart & Suites, un apart hotel que se encuentra en pleno centro de la Villa Serrana, a media cuadra de la peatonal y sobre una vía de acceso privilegiada desde la Ciudad de Córdoba.